Con esa información la víctima realizó la denuncia a las autoridades, quienes procedieron a realizar un allanamiento en Manantiales al 3100. En el lugar, la Policía dio con su celular, pero hallaron algo más.
La patrulla del Comando Radioeléctrico entrevistó a una mujer que dijo vivir en esa casa junto a su pareja que se dedicaba a reparar teléfonos celulares. Al ser consultada por las características del teléfono robado entregó una caja que supuestamente le habían llevado días atrás para arreglar.
En su interior descubrieron un iPhone 13 de color celeste con funda protectora plateada; un iPhone 12 de color rosado; un iPhone 12 de color blanco; un iPhone 11 de color rojo; un iPhone 11 de color negro; un iPhone 11 de color verde; y un iPhone SE de color blanco.
Los agentes secuestraron los teléfonos y trasladaron a la comisaría al supuesto reparador,que quedó a disposición de la Justicia.