El vicepresidente del Concejo Municipal de Rosario, Roy López Molina, presentó un proyecto propio para un nuevo Código de Convivencia y remarcó que la discusión debe estar “alejada de posturas políticamente correctas para actualizar la definición de lo que está bien y lo que está mal en la ciudad”.
“Aprobar una nueva normativa es fundamental para frenar la violencia”, dijo el edil, que participó de la presentación que hizo el intendente Pablo Javkin este lunes en el Palacio Vasallo, y sostuvo que “es una gran oportunidad para dar un debate serio y realista, lejos de posturas cómodas y políticamente correctas que no solucionan nada”.
En diálogo con los medios, el titular de la Comisión de Control, Convivencia y Seguridad Ciudadana confirmó además que ya presentó su iniciativa. “Nos sumamos al debate habiendo sido el único espacio de oposición que presentó un proyecto propio para modificar el actual Código de Faltas”, sostuvo.
“Nuestra propuesta, por ejemplo, toma con mucha claridad el problema de los aprietes de los cuidacoches, el de quienes cortan una calle sin autorización o a los que corren picadas, y apunta a prohibir o sancionar esas actividades. No hay que seguir mirando para el costado”, reclamó López Molina.
“Apelamos también a una Justicia de Faltas independiente, imparcial, que tenga mucho más que ver con la Justicia que con lo administrativo. Que los jueces dejen de ser delegados del intendente y pasen a ser verdaderos jueces en lo local”, agregó.
Por último, López Molina especificó que “la tarea a partir de ahora es abrir una amplia discusión y con el compromiso de todos los espacios políticos sancionar una normativa que salga por consenso y no por mayoría, para que perdure en el tiempo”.