La herramienta será utilizada como una opción más para el financiamiento de pymes.
Las pequeñas y medianas empresas (pymes) tendrán una nueva alternativa para financiarse en el mercado de capitales desde el 1 de abril próximo, cuando los bancos empiecen a ofrecer la operación y descuento en home banking de Facturas de Crédito Electrónicas (FCE).
Se trata de un instrumento que mueve unos $ 250.000 millones por mes y cuyo potencial, según especialistas consultados por Télam, es incluso mayor al de los cheques de pago diferido.
Si bien hay bancos que ya tienen vigente el mecanismo, la implementación del Sistema de Circulación Abierta de la FCE que dispuso días atrás el Banco Central ampliará el servicio a todos las entidades con cartera pyme, de modo que puedan descontar o transmitir las facturas otros sujetos autorizados, como entidades de crédito extrabancarias.
Aunque casi 140.000 pymes emiten FCE cada vez que prestan un servicio de más de $ 146.885 a una empresa grande, no todas saben que, una vez aceptadas, las facturas se transforman en un instrumento de crédito que puede descontarse de forma similar a la de un cheque.
Si bien está vigente desde 2018, la falta de difusión y el desconocimiento de las empresas impidieron que la FCE alcance su potencial crediticio, por lo que se espera que con el apoyo del sistema financiero crezca su funcionamiento.
“Ahora será más simple acceder a la información de las FCE, ya que tanto quien emite como quien recibe las facturas podrá verlas desde sus home bankings y tomar acciones desde ahí“, aseguró a Télam Mariela Pérez, Product Manager de Pagos Comerciales para Empresas de Banco Galicia.
Abogó por que “así como sucedió con el cheque electrónico, la FCE permita que más gente acceda a medios de pago digitales y el mercado completo se beneficie“.
En el caso del Banco Itaú, “la operatoria ya está disponible desde el año pasado y tiene incluida, entre otros servicios, la consulta y generación de las operaciones de descuento desde la home banking“, señaló Gonzalo Zugazaga, gerente de Producto y Analytics.
Si te toman los datos de enero de 2021, solo se operaron $ 142 millones en FCE en el Mercado Argentino de Valores (MAV), apenas el 0,05% del total de facturas cuando, por ejemplo, en el mismo mes los créditos comerciales crecieron $ 30.000 millones.
“El potencial es enorme. La FCE nació en 2018 a dos meses de una recesión muy fuerte. No se le dio la capacitación y difusión necesaria. Eso hizo que el instrumento quedara en un limbo. Ahora el escenario es distinto“, apuntó Bruno Cosentino, CEO de Invoition.
Télam