Los depósitos en dólares del sector privado cerraron 2020 en US$ 15.956 millones y crecieron US$ 1.345 millones en el último mes y medio del año pasado, por lo que recuperaron los niveles que tenían a principios de octubre, según datos del Banco Central (BCRA).
De esta forma, los depósitos en moneda extranjera hilvanaron seis semanas consecutivas de crecimiento desde su nivel más bajo el 11 de noviembre, cuando habían alcanzado los US$ 14.611 millones.
La combinación de estabilidad en las brechas con los dólares paralelos, una postura compradora del BCRA en el mercado cambiario durante casi todo diciembre y la menor tensión en la expectativa de devaluación del tipo de cambio explicaron este fenómeno, según economistas consultados por Télam.
Otros motivos que influyeron en esta tendencia fueron factores estacionales de menor demanda de dólares, y la decisión de otros de bancarizar sus depósitos para evitar pagar alícuotas más altas en el impuesto a los Bienes Personales.
“Hay una influencia indirecta entre la calma de los dólares paralelos y el aumento de depósitos. En Argentina, cuando hay muchas expectativas de devaluación, hay miedo de un corralito. No es ese el escenario, pero los miedos de la gente y la historia vienen por ahí“, aseguró el economista jefe de Ecolatina, Matias Rajnerman.
Al respecto, señaló que hubo tanto “factores estacionales como de control de importaciones en los últimos meses“, pero también “un cambio de dirección en la compra de divisas, tanto en el oficial como en el mercado paralelo, que se suma a que la salida de dólares por el turismo está casi parado”.
“El Banco Central compró en los últimos años, en promedio, en diciembre unos US$ 180. En 2020 fueron US$ 500 millones. Eso es una buena noticia. Ahora, que sea perdurable o no dependerá de la Covid y si vuelven las restricciones. Eso haría caer la recaudación, aumentar el gasto y es posible que haya una devaluación en ese escenario“, aseguró.
¿CALMA CAMBIARIA?
Para Julia Segoviano, economista de la consultora LCG, la “calma cambiaria” que se alcanzó en las últimas semanas “no es estable, pero sí estabilizó el mercado“, por lo que “si bien no implica una resolución de los problemas de fondo, es cierto que los factores estacionales tuvieron buenos resultados sobre los depósitos en dólares“.
“Las corridas de depósitos en dólares son por la incertidumbre, por una brecha en aumento o por la falta de confianza en las medidas económicas. Que (el Ministerio de) Economía haya podido tener buenas licitaciones y se controlara la brecha influyeron bastante para el cambio de tendencia“, aseguró la economista.
Entre el primer día del 2020 y el cierre del año, los depósitos en dólares cayeron US$ 3.409 millones, sobre todo después del salto en las brechas cambiarias a mediados de septiembre, cuando la cotización del “dólar blue” llegó a superar los $ 190 y se impusieron medidas más estrictas para la compra de dólar en el mercado oficial.
“Esta es una situación coyuntural y en la medida que sigan las restricciones para el comercio exterior se está dando la señal de que, pese a la postura compradora, hace falta restringir la demanda para evitar que se te filtren los dólares“, aseguró Segoviano.
Télam