Samsung es la fabricante de smartphones número uno del mundo, y gran parte de su éxito ha sido la gran diversidad de productos que ha ofrecido durante estos años, cubriendo todos los segmentos del mercado.
Este distintivo que le ha llevado a alcanzar a cima, probablemente le haya jugado en contra en los últimos resultados, en donde la compañía ha perdido participación de mercado –aunque mantiene el número uno cómodamente- y se han reducido las ganancias.
Wall Street Journal reporta que Samsung está tomando medidas para mejorar la situación en relación a rentabilidad y una de ellas es justamente reducir la cantidad de productos que ofrece, para optimizar así las líneas de producto.
Samsung planea bajar hasta un 30% la cantidad de modelos que ofrecerá al mercado en 2015, según indicaron desde la compañía en una conferencia realizada en la ciudad de Nueva York.
Reduciendo la cantidad y compartiendo más componentes entre diferentes modelos, la surcoreana planea aprovechar mejor los recursos y detener la caída en las ganancias, y así mantener a los inversores optimistas.
2014 ya parece haber terminado en relación a nuevos lanzamientos, y 2015 será un año clave para Samsung, si desea mantenerse en la cima y no dejar que sus competidores se le acerquen, especialmente los de origen chino.