El último tiempo se puede observar una gran oferta de inmuebles destinados a la venta que de acuerdo a las zonas triplican la oferta de alquileres. La situación del mercado inmobiliario es preocupante ya que desde hace 10 años se observa una falta de fluidez en los términos de la compra- venta de propiedades.
En las calles se pueden observar que los carteles de venta de inmuebles han aumentado incluso superando ampliamente a la cantidad de propiedades que se ofertan para alquiler. Las ventas efectivas son pocas y se va acumulando stock de oferta.
Los corredores inmobiliarios de la ciudad explican que el aumento en la oferta de inmuebles para la compraventa es multicausal: por un lado, la ley de alquileres ha presionado y muchos propietarios están optando por vender debido a la baja rentabilidad que tienen los alquileres en relación a otros años, sumado a que el alquiler siempre presenta riesgos sobre todo para el propietario.
Otro tema coyuntural es la incertidumbre política y económica que hay en Argentina, situación que hace que mucha gente decida vender y prefiera tener los dólares en la mano, incluso bajando los precios de los inmuebles.
Los índices indican que el sector lleva una década de amesetamiento, con una leve variación en el primer trimestre del 2018 cuando se lanzaron los créditos UVA y los créditos hipotecarios y volvió a caer cuando en junio de ese año hubo un salto devaluatorio.
Otra de las causas de la crisis es que el mercado inmobiliario no se adaptó a la actualización de valores de las propiedades que se ofrecen para la venta ya que en pesos aumentaron, pero si se calcula la cifra en dólares el precio disminuyó.
Por otra parte, la baja rentabilidad de los inmuebles para alquileres que viene desde el 2018 no fue motivo suficiente para que los propietarios pusieran a la venta sus propiedades, sin embargo, a partir de la sanción de la ley de alquileres la situación cambió.
Las dificultades existentes de corte político y económico hacen que en Argentina sea necesario repensar la estrategia de acceso a la vivienda ya que cada vez menos gente puede acceder a inmuebles de cierta categoría.