El español Rafael Nadal conquistó este domingo su título número 13 de Roland Garros tras derrotar al serbio Novak Djokovic por un aplastante 6-0, 6-2 y 7-5, en menos de tres horas de juego.
De esta manera el tenista mallorquín igualó al suizo Roger Federer como máximo ganador de torneos de Grand Slam con 20 laureles.
En una atípica final con público limitado y techo cerrado en la cancha central Philippe-Chatrier, Nadal ratificó su poderío en el torneo parisino con una contundente victoria contra el número uno del mundo.
En 2 horas y 41 minutos, Nadal se sacó de encima a un desconocido Djokovic y celebró su título número 13 de Roland Garros, cantidad inusual para un ganador de uno de los majors del tenis y al mismo tiempo sumó su victoria número 100 en el torneo parisino en 102 partidos disputados, un hito que solo él pudo conseguir.
Por tercera vez, el serbio no pudo contra el poderío de “Rafa” Nadal en el polvo de ladrillo de París y por ahora se conforma con haber sido uno de los dos tenistas que pudieron ganarle.
Nadal acumula un increíble récord de cien victorias en Roland Garros y solo perdió con el sueco Robin Soderling (2009) y con Djokovic (2015).
A quince años del primer título que le ganó al argentino Mariano Puerta, Nadal no perdió su espíritu competitivo y redondeó una final perfecta ante el número uno del mundo. Solo cometió 14 errores no forzados contra 52 del serbio.
En el primer set, Nadal minimizó a Djokovic, lo paseó de un lado a otro y en 48 minutos se llevó un histórico 6-0.
Nadal ganó 6-0 un set de una final por primera vez en su carrera y logró repetir algo que solo había sucedido cinco veces en la historia de los grandes abiertos. Además se quedó con su 4to Roland Garros sin perder un set durante los siete juegos.
En las rondas previas había sacado al argentino Diego Schwartzman, al italiano Jannik Sinner, al estadounidense Sebastián Korda, al italiano Stefano Travaglia, al estadounidense Mackenzie McDonald y al bielorruso Yegor Guerásimov.
En una edición que se presentaba complicada por las dificultades que marcó durante el torneo en cuanto al clima y las pelotas, Nadal se reafirmó como el “Rey de Roland Garros”.