Y al igual que su hijo Arón Urbieta, resultó imputado como financiador del narcotráfico. Durante la investigación previa, que llevó un año, el fiscal Javier Arzubi Calvo detectó que ambos tenían vinculación con integrantes de Los Monos y que recorrían frecuentemente domicilios de Rosario donde funcionaban puntos de venta de drogas, en Las Flores, Saladillo y Vía Honda, entre otros.
Fuentes judiciales que dialogaron con Red Boing destacaron que la figura aplicada por el juez a los imputados como financiadores del narcotráfico es “más grave que la de lavado de dinero”. El organizador de la banda, entre tanto, para el fiscal era Guillermo Andrés Lucchesi, que también fue imputado. En total de los trece detenidos el viernes en los casi 30 allanamientos sorpresivos de la Policía Federal, se imputó a ocho personas, los restantes cinco como miembros de la organización.
Al allanar, un dato que llamó la atención fue que padre e hijo tenían una enorme cantidad de alhajas de oro y plata. De acuerdo a las pesquisas de Arzubi Calvo, era utilizado por la banda como parte del mecanismo para financiar las operaciones de venta de droga. En la pared del piso 13 en Puerto Norte, se verificó con instrumentos especiales de búsqueda, que el Urbieta Llamas escondía oro.
Durante el desarrollo de la causa, también se encontró que el financista paraguayo mantuvo contactos con Lorena Verdún, viuda del “Pájaro” Cantero, el líder de Los Monos asesinado en 2013. En el operativo se encontró dinero en pesos y en dólares, alhajas, droga, armas y varios vehículos. Uno de ellos estaba estacionado en la cochera subterránea de Puerto Norte. Las indagatorias se realizaron el lunes y martes en los Tribunales Federales. En los próximos días, deberá resolverse la situación procesal de los imputados.