La lesión de Nicolás Tagliafico dejó vacante el puesto de lateral por la izquierda en Argentina para el choque ante Paraguay por la tercera fecha de Eliminatorias Sudamericanas y Nicolás González, el nombre menos pensado, resultó la carta guardada del entrenador Lionel Scaloni.
Los nombres de Facundo Medina y Lisandro Martínez rondaron en la previa como posibles reemplazantes del defensor de Ajax de Países Bajos, pero González, con mucha sorpresa, se quedó con el puesto.
El asombro en la elección residió porque su puesto actual en Stuttgart de Alemania es delantero, de número “9”.
En otras temporadas se lució como mediocampista externo, por las bandas, pero nunca en la línea defensiva.
Scaloni, tan solo con un entrenamiento en Ezeiza, se decantó por González, integrante de la Sub-23 campeona en los Juegos Panamericanos de Lima, que cumplió ante la urgencia.
González convirtió el gol del empate, de cabeza, a través del tiro de esquina ejecutado por Giovani Lo Celso, y se mostró más suelto en las proyecciones, su hábitat natural.
Protagonista en el gol anulado
También le queda el sabor amargo ya que el gol anulado al crack Lionel Messi por revisión del VAR lo tuvo como protagonista con un pisotón a Ángel Romero, su adversario del mano a mano por la franja, donde exhibió su oficio escaso como defensa.
El delantero surgido en Argentinos Juniors y hoy devenido en defensor, estuvo atento en la marca durante la primera parte, cuando la Argentina se paró con un 4-3-3, y no fue desbordado.
En busca del triunfo, el equipo de Scaloni, sin muchas ideas, pobló el área rival con González incluido, más adelantado, pero con la responsabilidad de no descuidar la espalda.
González, de 22 años, cumplió su cuarto partido en el seleccionado.
Los anteriores ocurrieron en 2019: titular en la victoria por 6-1 ante Ecuador en octubre e ingreso ante Brasil (1-0) y Uruguay (2-2) en noviembre.