Mientras una parte del socialismo santafesino apoya la candidatura presidencial de Roberto Lavagna y sigue con la convicción de llamar a su electorado a votar en blanco en caso de una segunda vuelta, los números muestran que la mayoría se mete en la grieta y opta por el menos malo (Macri-Pichetto/Fernández-Fernández).
Al igual que en 2015, el socialismo santafesino y la izquierda siguen con la idea de votar en blanco si se repite la historia en 2019 (aunque otras corrientes internas ya manifestaron lo contrario) y Ciudad Futura apoya a la fórmula de Fernández-Fernández, como en 2015 lo hizo con Daniel Scioli.
Más allá del mensaje que bajan los dirigentes para con sus “electorados”, los números de las presidenciales de 2015 muestran que nadie es dueño de los votos.
En noviembre de 2015, cuando se disputo la segunda vuelta entre Daniel Scioli y Mauricio Macri, solo el 1,9 por ciento del padrón voto en blanco. Mientras que los votos nulos alcanzaron el 1,24%.
El menor porcentaje de votos en blanco que se registró en el proceso de elección presidencial. En las generales de octubre alcanzó el 2,5% después de haber superado, junto con los votos nulos, el 5% en las PASO.