“No se reconocerá crédito por servicios que hubieran sido pagados en efectivo”, aclaró el Ministerio de Turismo.
Esta restricción provocará que aquellas compras abonadas en efectivo no se vean beneficiadas por el 50 por ciento de reintegro de las sumas abonadas de hasta $100.000. La medida habría sido tomada en base a una serie de fraudes registrados en el 2021.
Según informes, los casos detectados fueron 10 de 14 mil prestadores y por una cifra menor en comparación al volumen del programa, pero fueron los suficientes para dar de baja esa posibilidad. Aunque no se sabe la mecánica ni los montos, sólo se aseguró que fueron ocho agencias de viaje y dos hoteles.
Esta operación, según indican, es relativamente fácil de operar para prestadores “chicos” inscriptos como monotributistas o autónomos que tienen menos controles que una empresa grande. Es por eso, que aquellos que ejercieron esta estafa se verán afectados siendo suspendidos de manera definitiva y siendo denunciados judicialmente.