La tecnología trae grandes ventajas y facilita muchas de las tareas que realizamos cotidianamente, pero también genera en muchos casos una relación de dependencia con los dispositivos que utilizamos.
Si bien sabemos que el smartphone no puede usarse en algunas situaciones, le llegada de nuevos gadgets resulta en nuevas medidas de uso, en algunos momentos y lugares.
Los relojes -que raramente nos quitamos- se están convirtiendo lentamente en smartwatches (relojes inteligentes) y previendo el avance de estos nuevos dispositivos en los usuarios (especialmente en los más jóvenes) las universidades están tomando medidas.
London City University se unió a otras universidades de Londres y Reino Unido para prohibir los relojes en los exámenes, según indica BuzzFeed, y así evitar que sirvan como fuente de información y resulten en copias o ayudas.
Si bien por el momento la proporción de smartwatches es menor al de los relojes tradicionales, la dificultad de identificar y realizar un análisis de cada estudiante para saber de qué tipo de reloj se trata hace que las universidades hayan decidido prohibir a todo tipo de relojes.
“Adoptamos los mismos procedimientos que con los teléfonos”
En diferentes universidades de Reino Unido, se le solicita a los estudiantes que para los exámenes coloquen los teléfonos en bolsas plásticas debajo del escritorio, y este procedimiento es el que se repite ahora con los relojes, independientemente de que sean inteligentes o no.
Además, colocaron relojes de pared más grandes y en más áreas para que los estudiantes vean la hora, función en el smartwatch se convierte en secundaria.