A 28 años, la causa por el atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina se encuentra plagada de irregularidades, y aún sin culpables.
El 18 de julio de 1994, la Argentina vivió una de sus tragedias más grandes, que aún sangra. A las 9:53 de la mañana, un cochebomba explotó en la puerta de la Asociación Mutual Israelita Argentina en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, causando 85 muertos y más de 300 heridos. A 28 años, la causa se encuentra plagada de irregularidades, y aún sin culpables.
En ese sentido, Raúl Kollmann, periodista que cubrió el atentado y hasta declaró en la causa, dialogó con Gabriel Pennise en Radio Boing. “La situación es que no sabemos nada. Se hizo con 300 kilos de explosivos y a 28 años todavía no sabemos de donde salieron, y eso que no es tan fácil de conseguir”, comenzó.
“Está probado que la camioneta con que se hizo el atentado es una Traffic, pero no sabemos quién y cómo la compró. El motor era de un armador de autos robados, Carlos Telleldín, pero no sabemos quien manejó hasta la AMIA ni quien la compró. No sabemos prácticamente nada. La semana pasada salió un informe donde se dice que no se puede avanzar en nada”, continuó.
Por otra parte, Tuny relató: “Los familiares de las víctimas fueron los que más insistieron para que se sepa la verdad. Uno no le puede pedir a la Justicia que tenga la capacidad de investigar un atentado, ellos estudiaron derecho. Quien debió esclarecer esto es la policía o los servicios de inteligencia, pero fracasaron rotundamente”.
“Fue una vergüenza, hay una trama geopolítica internacional que produjo una serie de informes de inteligencia según los cuales la responsable fue una asociación libanesa que es pro iraní, Hezbolá, pero nunca hubo pruebas concretas”, aseguró.
En cuanto a las teorías que se formularon alrededor del atentado, Kollmann se refirió a una en puntual: “Yo pienso que tuvo alguna relación con Brasil, esencialmente porque en el ataque que sufrió la embajada de Israel se utilizó un documento brasilero, y porque alguien de ese país alertó sobre lo que iba a suceder en la AMIA”.
“Hay algunos elementos que hacen pensar que alguien de Brasil sabía algo, que algo se cocinó en Foz de Iguazú o en la Triple Frontera. Sueño con que en algún momento se presente algún arrepentido”, agregó en relación al tema.
Por último, Tuny destacó: “Me gustaría haber hablado con alguien iraní o libanés. Hacer una entrevista con tranquilidad, pero ellos niegan haber tenido algo que ver. Aún así me da la impresión de que ellos deberían haber colaborado con la Justicia argentina, deberían haber dado respuestas más concretas”.
“Hasta 2001 no pasó nada, y el atentado en Argentina fue en el 94. Yo quise viajar a Estados Unidos para saber que elementos tenían sobre el atentado de acá, y ellos decían que le daban importancia al narcotráfico, no al terrorismo. Hasta que pasó lo de las torres gemelas no le dieron importancia a estos temas”, cerró.