De acuerdo a un relevamiento realizado por la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina, el consumo de este producto registró una fuerte baja en los últimos años. Los datos empeoraron después de conocerse los primeros números arrojados por el Censo Nacional.
“Las estimaciones sobre las que trabajábamos nosotros decían que para este año había 46.230.000 de personas y actualmente tenemos un millón de personas más (47.300.000). Por lo tanto, el consumo per cápita se va achicar en esa proporción”, explicó Miguel Schiariti, presidente de CICCRA.
Teniendo en cuenta los nuevos datos arrojados por el INDEC, el consumo de carne vacuna de los últimos 12 meses es de aproximadamente 46,5 kilos por habitante por año. Cabe destacar que antes del Censo, el promedio anual por persona era de 47,4 kg.
La misma baja en el consumo se registra en otras carnes sustitutas, como es el caso del pollo y del cerdo. En este tipo de alimentos, también un marcado descenso: pasó de 108,6 kilos por habitante por año a 106,5 kg.
En cuanto a las exportaciones de carnes bovinas, en abril alcanzaron un valor de cerca de 294 millones de dólares, siendo muy superiores a las obtenidos en el mismo mes del año pasado. Además, también registró una suba, de casi el 10%, con respecto a los números obtenidos en marzo de este año.
“Como consecuencia de la tendencia significativamente positiva de los precios, que tuvieron una variación del (+54,6%) al comparar los meses de abril de los años 2021 y 2022, se produjo una suba significativa, del (+42,8%) en el valor obtenido, que resultó de signo contrario con relación a una moderada contracción interanual, del (-7,7%), en los volúmenes exportados”, expresó Miguel Schiariti