La medida es parte del Régimen de Sostenimiento e Inclusión para Pequeños Contribuyentes.
El Gobierno nacional reglamentó, a través del decreto 337, el Régimen de Sostenimiento e Inclusión para Pequeños Contribuyentes, aprobado a comienzos de abril por la ley 24.977, que reformó el monotributo para ofrecer un conjunto de beneficios fiscales a quienes son excluidos del régimen.
La norma alivia la carga de quienes, al convertirse en Autónomos, acumulan deudas fiscales muy difíciles de afrontar, ya que los cambios “estimulan el paso voluntario al régimen general“, destacaron fuentes oficiales.
Las modificaciones a la ley, agregaron los voceros, “armonizan la transición hacia el régimen general (autónomos), tanto en términos administrativos como en los montos de las obligaciones que deben afrontar los monotributistas“.
La iniciativa reglamentada beneficia a todos los monotributistas al establecer un régimen permanente que hace menos gravoso pasar al régimen general y también es “una ganancia para el Estado, ya que dispondrá de mucha más información“, se indicó.
El proyecto crea un “puente“ que permite a los monotributistas que se conviertan en autónomos experimentar un “ahorro significativo” en su carga tributaria, con relación al monto que deberían pagar si no se introducen los cambios propuestos.
La reforma, concretamente, ofrece reducciones del IVA y Ganancias por tres años para los contribuyentes que cambien de régimen.
Télam