Williams Alexander Tapon, que iba había sido imputado por “homicidio agravado por alevosía en grado de tentativa en el contexto de un espectáculo deportivo”, fue hallado muerto luego de la viralización de las imágenes en las que se lo veía pegando un golpe descalificador a Ariel Paniagua.
Según las primeras informaciones, se encontró el cuerpo de Tapon en las vías del tren a la altura de General Paz y Heredia, de la localidad de Sarandí. Fuentes dictaron que el joven de 24 años se habría efectuado un disparo con arma de fuego en la cabeza.
Marisol, prima del joven fallecido, dijo al medio Infobae que recibieron supuestas presiones por parte del árbitro, un hombre de 36 años oriundo de la provincia de Formosa que dirigía en ese torneo amateur desde hace tres meses: “Mañana (por este martes) vamos a velarlo pero después vamos a contar nuestra verdad en todos los medios de comunicación”.
Este lunes se viralizaron imágenes tomadas con un teléfono celular en las que se ve que luego de una brutal agresión de dos jugadores, el árbitro Ariel Paniagua, quedó tendido en el suelo y recibió una patada a la altura de la nuca que lo dejó desmayado. Williams Alexander Tapón le pegó dos trompadas al rostro del árbitro, aprovechando que estaba anotando una expulsión y, una vez que cayó al piso, indefenso, le aplicó una potente patada a la cabeza que le terminó provocando el desvanecimiento.
“Gracias a Dios estoy en casa, recuperándome de a poco. Me pudo haber matado, hoy mi familia me podría estar velando”, manifestó este lunes por la tarde Paniagua. “Este muchacho no lo pensó, no le salió un ‘disculpame, me equivoqué’. Sólo me dijo ‘lo hice por calentura’”, reclamó el juez en diálogo con Telefe. “Yo le pedí disculpas, me nubló, no fue queriendo. Cuando me rescaté ya era todo distinto”, fue la excusa del agresor que luego se terminó quitando la vida.