Las empresas ya estaban en camino a la nube cuando llegó la pandemia que aceleró la necesidad de contar con mayor agilidad. La urgencia para adaptarse a los cambios en las condiciones y poder trabajar en forma remota acentuó los beneficios de las soluciones en la nube.
Al no tener que preocuparse por la infraestructura física del hardware y de la seguridad, las empresas pueden rápidamente implementar nuevas soluciones de punta a punta que se adapten a los cambios principales de los modelos de negocios a medida que responden a las presiones del mercado y aprovechan las nuevas oportunidades. Las soluciones en la nube tienen una alta demanda entre las industrias más golpeadas por la pandemia. La innovación es la táctica de supervivencia.
El movimiento global se puede comparar con una espada de doble filo. Por un lado, la pandemia causa una disrupción masiva a las empresas. Por el otro lado, brinda a las organizaciones el tiempo para pensar cómo la tecnología puede ayudar en un mundo que será muy diferente luego del COVID. En este marco, Rubén Belluomo, Gerente Comercial de Infor Cono Sur, remarca algunas claves y puntos a tener en cuenta.
PROBLEMAS CLAVES
La gestión de la cadena de suministro es una función que ha recibido fuerte impacto. Desde la escasez repentina y severa de productos como máscaras, higienizadores de manos, papel higiénico, mostraron la vulnerabilidad de la red. Los negocios comerciales vieron una baja de la demanda, pero la demanda del mercado consumidor aumentó. El cambio de inventario a las tiendas locales resultó bastante difícil.
El sector de Retail, también enfrentó retos de inventario tratando de ajustarse a los compradores que se volcaron a las compras online. Poder adaptarse a grandes cambios con el software existente puede ser problemático. Las soluciones tradicionales “on premise” toman mucho tiempo y experiencia en códigos para poder hacer updates complicando a las empresas en su lucha para adaptarse.
UNA CUESTIÓN DE RESILIENCIA
Existe también una preocupación general global de que está ocurriendo con el negocio en su totalidad. Las organizaciones están también preocupadas sobre la sustentabilidad y la resiliencia luego de la pandemia. Las empresas grandes están en general mejor equipadas para adaptarse, y las empresas pequeñas son las más golpeadas, lo que crea una disparidad aún mayor.
La brecha entre aquellos que se adaptan y los que no seguirá ensanchándose en la medida que regresan los gastos, viajes y actividades en persona de los consumidores, explican los expertos.
La innovación es el salvavidas económico. Las empresas usan soluciones EAM para la gestión de los activos físicos para lograr ambientes de trabajo seguro. Las empresas de manufactura utilizan las soluciones ERP en la nube para resolver temas de demoras de productos debido a las disrupciones de la cadena de suministro.
Los negocios de retail se están pasando a la venta online. Los restaurantes están transformando sus lugares de estacionamiento y las veredas en lugares con mesas con distanciamiento social en exteriores.
Las empresas de servicios se están volcando a las ofertas virtuales. Y los lugares de salud están transformando el caos en planes para lograr relaciones y crecimiento a largo plazo. El software ayuda a hacer realidad este tipo de cambios innovadores para la resolución de problemas. La implementación en la nube significa que estos cambios ocurren en forma remota y rápida.
CAMBIO DE PRIORIDADES
Las empresas que aprovechan la tecnología están ahora bien posicionadas para aplicar la innovación, las estrategias digitales y focalizarse en el cliente en el proceso de recuperación. Aquellas que no sigan el ritmo se quedarán atrás.
Muchas empresas se están preparando ahora para la recuperación. Se ven organizaciones priorizando planes que estaban posicionados como tres o cuatro en su listado de importancia. Ahora, ven que la implementación en la nube tiene sentido y debe ocurrir rápidamente.
Las soluciones en la nube alivian muchos temas como los servidores y la seguridad, cumplimientos, back-ups y futuros updates. El personal de TI no tiene más que dedicar meses o años para planificar los upgrades o agregar alguna nueva funcionalidad.
Las empresas ya no se preguntan ¿cuándo la nube? Ahora buscan con cual proveedor hacerlo en forma rápida y eficiente y con la menor disrupción.
NECESIDAD E IMPLEMENTACIÓN
El deseo de lograr un rápido retorno de la inversión (ROI) hace que muchas organizaciones tomen pasos osados en la adopción de nueva tecnología. Hay menos cuestionamientos de programas y de proyectos de prueba. “Los líderes de las empresas dicen que en 10 días han logrado los que antes les tomaba 10 meses”, afirma Kate Smaje, socia senior y colíder de McKinsey Digital. “Este tipo de velocidad es lo que impulsa una ola de innovación como nunca antes vimos”, agrega.
El modelo de implementación de Infor 60:30:10 ayuda a cumplir con las demandas de una rápida implementación. El modelo requiere 60% de la funcionalidad ya incluida, el 30% de funcionalidades específicas para la industria. El 10% restante serán los reales diferenciadores de cada empresa que son más personalizados. Al realizar la adopción de esta manera, las empresas buscan una mayor facilidad en la implementación y mayor rapidez para lograr valor.
Es un cambio de mentalidad y de estrategia. Las organizaciones valoran los ciclos más cortos y modernizar las funcionalidades en forma regular, en lugar de hacer grandes upgrades cada 10 años. Los ejecutivos en general son los primeros en reconocer que las modificaciones tienden a hacer que el progreso en el futuro sea más lento y que se deben evitar siempre que sea posible.