En un escenario de inflación creciente los ahorristas están en permanente búsquedas de opciones para no perder poder adquisitivo. Así lo demuestran los últimos datos del BCRA, referido al comportamiento de la cartera de depósitos plazos fijos en pesos.
Es interesante observar el estado de la economía, y como se mueven los distintos actores en un clima de alta inflación aún no resuelta. Los “pesos”, ya sea familiar o empresarial, no resulta un buen negocio. Ante esta situación, tratan de buscar alternativas para no perder poder adquisitivo y tomar cobertura de sus ahorros, siendo además, en las mayorías de las veces, ahorros momentáneos y transitorios.
En la actualidad, y ante la política de fuerte intervencionismo en la economía que lleva el Gobierno adelante,sumado a la falta de un plan integral, podemos detectar que las variables más importantes y que dominan a la MACROECONOMIA se encuentran en desorden y descoordinadas entre ellas. Esto, lógicamente repercute luego en la Microeconomía.
Podemos observar que las tres variables más importantes a las que hacemos referencia están mostrando un comportamiento que dista de ser el ideal y que debemos tener en cuenta a la hora de realizar los negocios o tomar decisiones referidas a la economía familiar y/o empresarial, a saber:
- TASA DE INTERES, está fijada por BCRA en TNA 37 % para inversiones de hasta 1 millón de pesos (depósitos minoristas). Para inversores mayoristas la tasa es TNA 34%.
- TASA DE INFLACION, controlada por precios cuidados, reciente programa “Súper Cerca” y retraso cambiario de la devaluación del dólar oficial. Al mes de mayo la inflación interanual rondara el 49 % interanual. Se estima para periodo enero a mayo una inflación del 22%
- TIPO DE CAMBIO, fijado por el gobierno por medio de las intervenciones para equilibrar su precio a través de compras en el mercado de cambios y sumadas a las trabas a la importación, al periodo enero a mayo fue de un 11%.
Claramente podemos observar estos indicadores y determinar que nuestra economía opera a “tasas negativas”, debido a que la “tasa de interés” del 37% o 34% es inferior a la “tasa de inflación” del 49 % interanual estimada a mayo. Así también podemos determinar que existe un retraso cambiario importante de un 11% versus una tasa de inflación estimada del 22 % para periodo enero a mayo. La experiencia de situaciones similares en el pasado indica que tarde o temprano estos desequilibrios ajustan a los costos reales de la economía, causando graves dificultades fundamentalmente en los sectores más desprotegidos.
Antes estas circunstancias las familias, individuos y empresas comienzan a tomar decisiones de “cómo defender su liquidez para no perder poder adquisitivo” y tener cobertura de los pesos.
Los rendimientos de las inversiones más tradicionales en “pesos” en lo que va de enero a mayo del 2021 lo podemos sintetizar en el siguiente cuadro:
Ahora bien, si observamos el comportamiento (mayo vs abril) de la cartera de “plazos fijos en pesos tradicionales” del sector privado del sistema bancario estableció una caída de 17.179 millones de pesos. Como contrapartida para ese mismo periodo el crecimiento de “plazos fijos UVA” fue de 23.287 millones de pesos, logrando de esta forma tener un crecimiento en el “total de los depósitos de plazos fijos” del sector privado de 6.108 millones de pesos.
Se observa que el incremento de los depósitos “plazos fijos en pesos UVA” tuvo relación directa con el rendimiento de la tasa, como así también la caída de los depósitos de “plazos fijos pesos tradicionales”.
La economía no puede funcionar con “tasas negativas”, es una muy mala señal y genera un clima de intranquilidad e incertidumbre para que los distintos actores de la economía puedan moverse y realizar sus negocios con normalidad y previsibilidad.
La responsabilidad directa para que una economía encuentre un mejor clima de negocios es del Gobierno. El ejecutivo nacional es quien debe generar un mecanismo equilibrado y estabilizado de las variables de LA MACROECONOMÌA (tasa de interés-tipo de cambio-tasa de inflación), que sea confiable, creíble y genere reglas claras de convivencia en los mercados. Sólo de esta manera, los distintos actores de la economía domestica podrán tener un mejor ambiente y un sistema transparente para poder gestionar sus negocios e inversiones.
En un segundo semestre donde el gobierno tiene su hoja de ruta en las próximas elecciones legislativas es probable que la TASA DE INTERES pueda subir, para no tener ningún contratiempo que pueda perturbar esta momentánea y de corto plazo, paz cambiaria monetaria y financiera que estamos viviendo en la actualidad.
Seguramente las soluciones de fondo y estructurales que necesita nuestra economía deberán esperar para luego del periodo eleccionario.